Las cosas no siempre salen según lo planeado, por lo que es importante adaptarse a las nuevas circunstancias y reconsiderar las estrategias anteriores. Si una cosa no funciona, intente con otra cosa.
Cada estudiante es un paquete único de personalidad, capacidad, impulsos, intereses, objetivos y estilos de aprendizaje. Intento que las clases sean divertidas, personales y atractivas personalizándolas para cada alumno. ¡Aprender es mucho más fácil cuando es interesante!
Es importante establecer objetivos claros para lo que queremos lograr, establecer un calendario claro para lograrlo y construir un buen plan de estudio para llevarnos allí. Empiezo a formular este plan durante el primer encuentro con un nuevo alumno y sigo el progreso regularmente.
Comienzo las clases con una "limpieza" de cualquier obstáculo mental o preocupación que pueda mantener a un alumno completamente presente y listo para aprender. Al abordar rápidamente estos problemas, los descartamos para que podamos aprender y crecer.
¡Aprender un idioma no solo requiere práctica, es una práctica! Mientras más tiempo pases hablando inglés con hablantes nativos, mejor hablarás inglés con hablantes nativos.